Llego el último fin de semana de Julio y para cerrar el curso antes del verano, aun teníamos la cita de la XII Copa de Cataluña de Jodo, como es tradición impartida por Robert Rodríguez, el cual comenzó esta andadura hace 20 años en un pueblo cercano a Vilafranca del Penedés.
El viernes nos toco madrugar ya que ese fin de semana coincidía con la operación salida del mes de agosto y para intentar evitar mucho tráfico en núcleos muy transitados como Burgos, Logroño y Zaragoza, salimos a primera hora, Juan, Manuel y yo.
El viaje no fue muy diferente a los anteriores que hemos hecho hasta Vilafranca, eso sí, destacar el enorme calor que nos acompaño todo el viaje, y sobre todo cuando parábamos a descansar en las áreas de servicio.
Alfonso Estrada y Manuel Quintela
Llegamos casi una hora antes de lo previsto, y nos dirigimos al pabellón donde ya estaban puntuales nuestro anfitrión Pere Calpe y algunos compañeros esperando a nuestro maestro, que llego escasos 10 minutos detrás de nosotros, a Robert le acompañaban Joan, Maxine y Stephane.
El curso comenzó puntual y tras el saludo de rigor se comenzó a trabajar el kihon de base, cuando se llego a los kiones más avanzados se separo a los participantes en dos grupos, uno dirigido por Pere, que se encargo de los mas noveles, y los más veteranos con Robert, primeramente se trabajaron de forma individual y la segunda parte de la jornada de la tarde se trabajaron en pareja, siempre bajo la atenta mirada de Robert dando las indicaciones oportunas, el correcto trabajo del Tachi en la distancia, y puntualizando detalles sobre el trabajo del Jo, dos intensas horas de trabajo que nos hicieron brotar el sudor ya que la concentración y energía que se desarrolla en este trabajo es muy fuerte.
La mañana del sábado comenzó soleada y con preludio de calor, y durante toda la mañana esa tónica fue la constante, y la constante en lo que al curso se refiere se extendió en esta mañana con mas kihon y más detalles, cada vez exigiendo mejor trabajo en la ejecución de los diferentes ejercicios, esta exigencia se veía y apeciava, cuando nuestro maestro para explicar el correcto desarrollo de un kihon, nos cogía y lo hacíamos con el…. Bien sea de ticho o de Jo, aprecias la intensidad y eficacia de los gestos y desplazamientos.
Tras el descanso del medio día, a las 16:30 ya estábamos en el pabellón preparados para continuar el curso, con el repaso de los kiones y ya entrando en materia con los kata, alrededor de las 17:30 empezaron a aparecer señales del preludio que nos obligaría a cancelar el curso, varios apagones de luz aunque cortos en un principio, se fueron prolongando, y empezamos a notar el enorme chaparrón que se escuchaba en el tejado del pabellón, en cuestión de segundos empezamos a ver como por las puertas de la instalación comenzaba a entrar agua a una velocidad poco común, de una forma inusual se paró el curso y cuando nos dimos cuenta estaba entrando agua por 3 de las 4 paredes del pabellón, incluso por los vestuarios que también se inundaron, algunos continuamos entrenando en las gradas de una forma informal, pero poco después nos reunión el organizador y dio por concluido la sesión de la tarde debido a lo impracticable que estaba el suelo del pabellón.
La cena del sábado la realizamos en un restaurante japonés cercano donde como es costumbre lo distendido de las charlas y conversaciones nos hizo pasar una buena cena, sin olvidar lo exquisito de los platos que nos sirvieron.
El domingo continuo el curso en el Dojo , donde se realizaron los exámenes que por fuerza mayor se cancelaron la tarde anterior, destacar el buen papel que desempeñaron los aspirantes en el examen y felicitarles desde estas líneas, y viendo como poco apoco esta disciplina marcial aunque veterana , es minoritaria en practicantes , pero poco apoco va desarrollando mas su nivel de práctica.
Tras los exámenes llego la competición, que en el post siguiente se pueden ver la clasificaciones de las dos categorías que se disputaron, felicitando a todas los vencedores y participantes por su trabajo, especialmente a Juan González que se alzo con el 1º puesto en la categoría hasta 2º Kyu, y Manuel Quintela que consiguió un tercer puesto, repitiendo la clasificación del año pasado.
En definitiva un buen curso a pesar de los contratiempos y más trabajo para desarrollar en nuestros Dojo.
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